Los riesgos si tienes una enfermedad cardiovascular y te quedas embarazada

Las mujeres con enfermedades cardíacas preexistentes pueden tener embarazos seguros y saludables, pero deben llevar controles más estrictos durante el embarazo, pues existen riesgos asociados.  El cuidado adecuado de las gestantes con cardiopatía durante el embarazo, el parto y el posparto requiere un equipo multidisciplinario que incluya cardiólogos, ginecólogos y anestesistas.

Al quedar embarazada, se producen algunos cambios en el sistema cardiovascular, el volumen de sangre se duplica, la frecuencia cardíaca aumenta y la presión sanguínea puede bajar debido al incremento de sangre en el útero. Esto no suele dar problemas a la gestantes sanas, pero pueden suponer importantes riesgos para tí y para el feto si tienes una enfermedad cardiovascular anterior al embarazo.

A mayor edad más tiempo en lograr el embarazo de forma natural

En general, los topes de fertilidad se alcanzan en torno a los 24 años y comienza a disminuir alrededor de los 35. Esto se debe a que el número de óvulos se reduce de forma importante. Frente al 86% de las mujeres de 20 años que logran el embarazo antes de un año, sólo el 36% lo logran si superan los 40 años.

¿La vitamina A durante el embarazo? Cuidado

Aunque la vitamina A tenga multitud de beneficios para nuestro organismo y el de nuestro bebé, como en la visión, el crecimiento óseo, el sistema inmunitario y el sistema nervioso, parece que debemos tener cuidado con la dosis que ingerimos, ya que tomar vitamina A en exceso se ha asociado con la aparición de graves defectos de nacimiento en los bebés, incluso puede provocar la interrupción del embarazo.


La vitamina A se encuentra en frutas y vegetales de color rojo, naranja y amarillo (cerezas, albaricoques, melocotones, zanahorias, pimientos rojos) y algunos productos de origen animal (mantequilla, yema de huevo,leche).

Una embarazada necesita un aporte diario de 800 microgramos de vitamina A.

¿Puedo abortar si mantengo relaciones sexuales estando embarazada?

Durante el embarazo, y mientras el ginecólogo no diga lo contrario, se puede mantener una actividad sexual normal, evitando los movimientos bruscos.
El bebé está protegido tanto por la bolsa como por el líquido amniótico, con lo cual, la penetración no puede dañarlo.
Sin embargo, si hay riesgo de parto prematuro, el sexo sí está contraindicado.