- Durante el primer trimestre, por haber tenido abortos previos, sangrado en las primeras semanas, placenta baja o previa, etc.
- En el resto del embarazo, por existir hemorragias, amenaza de aborto, rotura de la bolsa, incompetencia cervical, infecciones vaginales, etc.
- En las dos últimas semanas del embarazo se recomienda evitar las relaciones sexuales.
Aunque sí has de saber que, tras la relación sexual, puedes sentir contracciones y tener la tripa dura. Esto se debe a la actividad física realizada, al orgasmo, y a la prostaglandina, hormona contenida en el semen que, al depositarse en la vagina, pueda hacer que el útero se contraiga.
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